
Llevamos 2 años y medio con JC aprendiendo a ser papás, y es primera vez que nos vemos enfretados a la situación que ahora compartiré aquí. El fin de semana anterior tuvimos, digo tuvimos porque no me gusta ir a los centros comerciales los fines de semana, éstos están atestados de gente, además las tiendas estan desordenadas, etc ,etc bueno la cosa es que fuimos y obviamente fuimos con Joaquín, nuestro "torbellino". Entramos a una tienda, y empezamos a estresarnos ya que Joaquín quería ver y tomar todo, además no quería que lo llevaramos de la manito, a toda costa buscaba zafarse y ahí nosotros luchando con él, mejor dicho contra él para no darle en el gusto, lo recuerdo y ya me canso ufff!. Subimos al depto.infantil para buscarle algo de ropa , y JC decidió llevarlo a dar una vuelta por el departamento mientras yo me dedicaba a mirar, en eso al rato llegan ambos y JC me dice : "Mira lo que encontró" miro a Joaquín y veo que traía abrazada una caja en donde venía ni mas ni menos que Buzz Lightyear, su carita era de un asombro increíble, le brillaban sus ojitos, y en "su lenguaje" me decía "mamá, mamá mía (eso es mira),mía" , de pronto dejó la caja en piso y estiró unos de sus bracitos hacia adelante y con la otra mano hacía como que disparaba un laser desde su brazo igual que el personaje de la película Toy Story,nunca lo había visto así tan emocionado con un juguete. Miro a JC y luego tomo la caja para ver el precio, y la verdad es que se alejaba de lo razonable, por lo que había que actuar rapidámente para distraerlo y dejar el juguete en la tienda, en un descuido de él lo dejé escondido en una repisa, pero Joaquín lo notó y comenzó a buscarlo, la expresión de su carita era de una pena enorme, la verdad es que conmovía, desesperado me preguntaba por "afafaaaá"( en el idioma de Joaquín eso equivale " Al Infinito y mas allaaá") frase típica de Buzz Lightyear, no sabíamos que hacer, por una parte mi corazón decía que lo llevaramos, pero mi cabeza decía que eso no era sensato, porque el gasto sería algo excesivo, considerando además que había otras prioridades. Miraba a Joaquín y la verdad es que me daba pena de sólo ver su carita, y que creen, pues gracias a ·" Santa tarjeta de Crédito" le llevamos a Buzz. A mí se me hacía un "nudo en la guata" cuando entregué la tarjeta, pero por otra parte creo que nunca lo había visto tan emocionado, salimos de la tienda y no quería soltar la caja, ni siquiera dejó que metieran el juguete en una bolsa,iba feliz, ahora hasta duerme con Buzz Lightyear. Todavía me duele la guata y hasta me dá cargo de conciencia, pero digamos que fué una pequeña locura por un hijo, y es seguro que a lo largo de la vida habrán más.